Si usted solicitaba un préstamo antes de la década de 1980, su prestamista tenía que pedir sus informes crediticios y luego revisar cada uno de ellos línea por línea. Esto no sólo requería mucho tiempo, sino que implicaba una opinión subjetiva y dejaba margen para el error humano. En otras palabras, dos posibles prestamistas podían revisar los mismos informes crediticios y llegar a conclusiones muy distintas sobre su solvencia.
Llegó Fair Isaac
La empresa que entonces se conocía como Fair Isaac Corporation (ahora conocida como FICO) cambió las cosas radicalmente cuando creó la puntuación crediticia. La explicación breve de cómo funciona es que FICO asigna puntos a las variables que componen el informe crediticio de una persona. A continuación, utiliza modelos estadísticos que tienen en cuenta muchas variables y combinaciones de variables diferentes, para obtener finalmente un número de tres dígitos o puntuación crediticia. La calificación crediticia se impuso rápidamente entre los prestamistas por dos razones. En primer lugar, eliminaba toda subjetividad a la hora de calificar la solvencia de una persona y, en segundo lugar, ayudaba a los consumidores a obtener el crédito que necesitaban mucho más rápido.
Cómo funciona la calificación crediticia
Nadie excepto FICO sabe con exactitud cómo funciona su puntuación crediticia, pero se sabe que su puntuación está formada por cinco componentes.
- Historial de pagos, o cómo ha utilizado el crédito, que constituye el 35% de su puntuación.
- Utilización del crédito: cuánto crédito ha utilizado en comparación con la cantidad que tiene disponible, que es el 30% de su puntuación.
- Duración del historial crediticio - o cuánto tiempo ha tenido crédito, que es el 15% de su puntuación.
- Tipos de crédito utilizados: los diferentes tipos de crédito que ha tenido, como tarjetas de crédito y un préstamo para automóvil, que constituyen el 10% de su puntuación crediticia.
- Búsquedas recientes de crédito: o el número de veces que ha solicitado un crédito, que equivale al 10% de su puntuación crediticia.
Si te interesa saber un poco más sobre estos cinco componentes y por qué nunca debes cerrar una tarjeta de crédito, no dejes de ver este vídeo.
Haz cuentas
Si haces cuentas, sumando tu historial de pagos y tu utilización del crédito, obtendrás un 65%. Lo que esto significa es que el factor más importante en su puntuación de crédito es cómo ha utilizado el crédito, es decir, lo bien que ha hecho sus pagos y cuánto de su crédito ha utilizado en comparación con la cantidad que tiene disponible. Esto se basa en lo que se denomina ratio deuda-crédito. Por ejemplo, supongamos que tienes un límite de crédito total de 10.000 $ y que has utilizado 3.000 $ del mismo. En este caso, su ratio deuda-crédito sería del 30%, lo que sería bastante aceptable. Cualquier ratio superior a éste tendría un efecto negativo en su puntuación crediticia.
El sencillo truco
Obviamente, es muy poco lo que puede hacer sobre su historial de pagos porque, al fin y al cabo, es historial. Sin embargo, puede cambiar drásticamente su ratio deuda-crédito, lo que podría aumentar su puntuación crediticia hasta en 30 ó 40 puntos. Hay dos formas de hacerlo. En primer lugar, puede reducir parte de su deuda. Por ejemplo, supongamos que tiene un ratio deuda-crédito del 50% porque ha cargado 5.000 dólares contra un límite de crédito total de 10.000 dólares. Si pudieras reducir esos 5.000 $ a 3.000 $, ahora tendrías un ratio deuda-crédito del 30% y deberías ver un buen aumento en tu puntuación crediticia.
La segunda opción
Si hay razones por las que no puedes pagar tus deudas, aún hay un truco sencillo que puedes utilizar para mejorar tu ratio deuda-crédito. Se trata de conseguir aumentar tus límites de crédito. Puede ser difícil, pero si tienes un buen historial de pagos con uno o varios de tus proveedores de tarjetas de crédito, puedes ponerte en contacto con ellos y pedirles que aumenten tus límites de crédito. Si consiguieras aumentar tu crédito total disponible a, digamos, 15.000 $ y debieras los mismos 5.000 $, tu ratio deuda-crédito bajaría del 50% al 33%, lo que debería producir un buen salto en tu puntuación crediticia.
Cómo mejorar su historial de pagos
Hemos dicho antes que es muy poco lo que puede hacer para cambiar su historial de pagos, pero es posible que pueda mejorarlo. En primer lugar, tendría que obtener sus informes de crédito de Experian, Equifax y TransUnion. La ley les obliga a proporcionarle su informe crediticio gratuitamente una vez al año. Usted podría llamar o escribir a cada una de estas compañías y solicitar su informe de crédito o ir al sitio www.annualcreditreport.com y obtener los tres simultáneamente. Luego, en segundo lugar, tendría que revisar sus informes con mucho cuidado en busca de elementos negativos como.
- Morosidad
- Por defecto
- Cuentas de cobro
- Ejecuciones hipotecarias
- Embargos
Buscar errores
Es posible que haya un elemento negativo en uno de sus informes de crédito que sea un error. Si es así, debe impugnarlo inmediatamente. Para ello, escriba una carta a la oficina de crédito pertinente, junto con la documentación que tenga que respalde su reclamación. También debe enviar una copia de la carta y la documentación a la entidad que proporcionó la información errónea. Una vez que la oficina de crédito reciba su carta, deberá ponerse en contacto con la empresa que proporcionó la información y pedir que la verifiquen. En caso de que la empresa no pueda hacerlo o no responda en un plazo de 30 días, la oficina de crédito deberá eliminarla de su informe crediticio.
Lo que esto podría conseguir
Si consigue eliminar uno de estos elementos negativos de su informe crediticio, debería ver un aumento inmediato de su puntuación. Como ejemplo de esto, muchos expertos creen que un pago atrasado podría bajar su puntuación hasta 60 puntos. Si consiguiera eliminar ese pago atrasado de sus informes crediticios, debería ver casi instantáneamente un aumento de 60 puntos, lo que podría llevarle de tener un crédito "medio" a un crédito "bueno".