Muchos de nosotros buscamos formas de mejorar nuestro bienestar financiero. La buena noticia es que hay medidas concretas que puede tomar ahora mismo para alcanzar sus objetivos financieros. Exploremos 6 estrategias inteligentes que le ayudarán a mejorar su salud financiera este año.
Elabore un presupuesto y un plan de juego viables
Elaborar un presupuesto es una cosa, pero ceñirse a él es otra. He aquí el secreto: un presupuesto debe ser realista para ti. Antes incluso de que llegue el próximo sueldo a tu cuenta, intenta planificar el destino de ese dinero. Este sencillo paso puede ayudarte a priorizar el ahorro, aunque también tengas que hacer frente a las deudas. Mucha gente confía en el método de "pagarse a uno mismo primero". La idea es la siguiente: desvía automáticamente una cantidad fija de tus ingresos a los ahorros de inmediato, para no tener la tentación de gastarlo todo.
Crear un fondo de emergencia
Afrontémoslo, los gastos imprevistos ocurren. Pueden surgir reparaciones del coche, facturas médicas o incluso un cambio de carrera. Pero la buena noticia es que puedes estar preparado. Crear un fondo de emergencia es como crear una red de seguridad financiera. Empieza con poco, quizá 25 ó 50 dólares por nómina, y ve creciendo hasta convertirlo en un colchón que cubra entre 3 y 6 meses de gastos de manutención. De este modo, cuando la vida te lance una bola curva, podrás afrontarla con confianza, sin depender de deudas con intereses elevados.
Reconocer el coste real de la jubilación
La jubilación puede ser más cara de lo que imaginas. El hogar medio de un jubilado gasta unos 57.818 dólares al año, por eso la planificación es clave. ¿Y las buenas noticias? Empezar pronto y maximizar las aportaciones a cuentas de jubilación como 401(k)s, IRAs, o Roth IRAs es un movimiento poderoso, no importa tu edad. Además, aunque la regla general indica que necesitas entre el 70 y el 80% de tus ingresos actuales para jubilarte cómodamente, recuerda que un fondo de emergencia bien dotado puede ayudarte a hacer frente a gastos inesperados y a que tus años dorados sigan brillando con luz propia.
Transición de la deuda mala a la deuda buena
Entendiendo la deuda buena frente a la deuda mala: La deuda mala proviene de comprar cosas que realmente no necesitas con una tarjeta de crédito y pagar muchos intereses. Este tipo de gasto no ayuda a crear riqueza. Por otro lado, la deuda buena puede ser algo como un préstamo para educación o una hipoteca, que pueden ser inversiones en tu futuro.
Iniciar un plan 529 para gastos de educación
Piensa en abrir un plan de ahorro universitario 529. Es una cuenta especial que te ayuda a ahorrar para los gastos de educación. Lo mejor de este plan es que puedes pedir a familiares y amigos que contribuyan en cumpleaños o vacaciones en lugar de comprar regalos. Además, puedes seguir añadiendo dinero mientras tu hijo esté en la escuela, lo que podría ahorrarte dinero en impuestos cada año.
Contratar a un contable de confianza
Contar con un contable de confianza es muy importante, sobre todo ahora que la Agencia Tributaria presta más atención a las declaraciones de la renta. Un buen contable conoce todas las complejas normas fiscales y se mantiene al día de los nuevos cambios. Esto significa que pueden ayudarte a declarar tus impuestos correctamente, evitando el estrés de las auditorías o las multas.
Tomar las riendas de tus finanzas puede parecer abrumador al principio, ¡pero te da poder! Al poner en práctica estos pasos a lo largo del año, te estarás preparando para un año de progreso y seguridad financiera. Recuerda que los pequeños cambios pueden dar grandes resultados, así que ponte manos a la obra y verás cómo tu viaje financiero levanta el vuelo.