Aunque la mayor parte de Estados Unidos está bajo llave debido a la nueva pandemia de coronavirus, es probable que los efectos económicos de esta crisis perduren mucho después de que el virus remita. El Fondo Monetario Internacional indicó recientemente que la recesión económica tras el coronavirus podría rivalizar con la Gran Depresión, lo que significa que muchas empresas podrían permanecer cerradas y millones de estadounidenses podrían quedarse sin trabajo. Si cree que corre el riesgo de sufrir los efectos económicos del coronavirus, o ya se ha visto afectado por ellos, aquí tiene algunos consejos importantes sobre cómo ajustar sus gastos en una crisis financiera.
Controle sus principales facturas
Si espera perder su trabajo o una parte importante de sus ingresos debido a la crisis, debe adoptar un enfoque activo respecto a todos sus gastos clave. Haga una lista de todas las facturas que tiene actualmente, como la hipoteca, los pagos del coche, los servicios y las deudas. Determina también de cuánto dinero dispones para cubrir todas estas facturas. Si se está quedando corto, póngase en contacto con algunas de las empresas implicadas para ver si puede conseguir una prórroga o ajustar sus pagos. En algunos casos, los prestamistas están permitiendo que los prestatarios dejen de pagar varios meses de hipoteca para recuperarse, y muchas compañías de servicios públicos han hecho más generosas sus condiciones de pago debido a esta crisis.
Si actualmente utiliza un servicio de pago de facturas en línea, también debería suspender todos sus pagos automáticos. Si su situación financiera cambia drásticamente debido a la pérdida del empleo, es posible que no pueda pagar todas sus facturas como lo hacía antes de la crisis. En su lugar, debe controlar todos sus gastos próximos y pagarlos manualmente hasta que la crisis haya pasado y su situación financiera mejore. Así se asegurará de tener fondos disponibles en su cuenta para cubrir todas esas facturas y de no sobregirar involuntariamente su cuenta.
Reduzca sus gastos
Si aún no está viviendo tiempos de vacas flacas con menos ingresos, debe preparar a su familia para vivir con ingresos reducidos. Haz balance de tus gastos corrientes y busca áreas en las que puedas reducir gastos. Por ejemplo, puede que estés pagando por datos y servicios caros en tu teléfono que no necesitas; eliminarlos puede ayudarte a ahorrar mucho dinero en tu factura telefónica mensual. Si se ha suscrito a varios servicios de transmisión de contenidos en línea, cancele también algunos de ellos. En general, siga recortando los gastos del hogar hasta que su presupuesto se ajuste a los ingresos que aún tiene.
También durante la crisis financiera debe intentar reducir su deuda personal en la medida de lo posible. Trate de no acumular más deuda en sus tarjetas de crédito; unos saldos más altos darán lugar a pagos mensuales más elevados, que serán difíciles de gestionar con menos ingresos. Si puede, intente consolidar los saldos de sus tarjetas de crédito en una tarjeta con un tipo de interés más bajo. Una transferencia de saldo puede ayudar a reducir la carga de sus pagos mensuales y a mantener los gastos de su deuda bajo control hasta que se recupere.
Compre con inteligencia
Hacer la compra durante la crisis del coronavirus, con sus estanterías vacías, flechas de dirección en el suelo y controles de temperatura, ha sido todo un reto. Aunque es posible que algunos de estos retos desaparezcan en los próximos meses, la gestión de la factura de la compra seguirá siendo una tarea crítica mientras dure la crisis financiera. En general, su plan de compras debe ser tan ajustado como el resto de su presupuesto. Olvídese de buscar artículos de rebajas y céntrese en comprar alimentos que duren, con una larga vida útil o que puedan convertirse en apetitosas sobras uno o dos días después de haberlos preparado. Los almidones como el arroz y la pasta son opciones estupendas y versátiles para añadir a tu despensa, y considera también la posibilidad de comprar más alimentos congelados.
Además, aunque pedir comida para llevar puede resultar cómodo, es más caro que prepararla uno mismo; planea cocinar tus propias comidas la mayor parte del tiempo hasta que pase la crisis financiera. Por último, si tienes espacio para hacerlo, considera la posibilidad de cultivar tus propios productos a medida que el clima se vuelve más cálido. Los tomates, las verduras y otras hortalizas son fáciles de cultivar, y las semillas o las plantas de vivero son relativamente baratas. Un pequeño huerto puede producir una cantidad sorprendente de alimentos, y así comerás bien y ahorrarás dinero en la factura mensual de la compra.
Replantearse el ahorro
Si tiene ahorros que ha estado apartando para una gran compra, como una casa o un coche nuevo, debería reconsiderar definitivamente cómo utilizar ese dinero durante la crisis financiera. Aunque puede ser difícil renunciar a un objetivo importante en la vida por el que ha estado trabajando duro, puede ser necesario reutilizar ese dinero para superar la crisis. Puede que tenga sentido utilizar esos ahorros para ayudar a compensar el déficit presupuestario de los próximos meses, ya que sus facturas son superiores a sus ingresos mensuales; el dinero de su cuenta de ahorros puede darle margen para empezar a buscar un nuevo trabajo sin preocuparse por retrasarse demasiado en el pago de sus facturas.
Vivir la pandemia del coronavirus no ha sido fácil para nadie, y la crisis financiera que probablemente le seguirá será igualmente desafiante. Sin embargo, puedes tomar medidas ahora mismo para prepararte para vivir tiempos difíciles. Si sigues estos consejos, podrás tener los gastos de tu hogar preparados para capear la crisis financiera de la mejor manera posible y estar listo para superarla a medida que la economía se recupere lentamente.